Hoy te apoderaste de mi



Hoy te apoderaste de mí.
Te apoderaste de mi con tus menudas travesuras rondando por mi cabeza, 
casi danzando, descalza por mi cabeza.

Mi mente es un piso largo en donde tu nombre corretea con soltura, 
y se te mira alegre, radiante, enérgica. 
Tu risa es energía pura y renovable, mujer.
¡Como se alegra este cuerpo de pensarte!


Comentarios

Entradas populares de este blog

Utopías para merendar : La ciudad de los mutantes por Ana Black

¿Te pasará lo mismo? Me pregunto.

Aquella Noche...